Como sé que de todo aún queda mucho por decir. Como sé que con un par de líneas nunca es suficiente.
Como tantas otras veces traté de buscarle sentido a una misma situación encerrada en un círculo vicioso.
Pero ya no, ya no busco respuestas; quizás busque más preguntas que me dejen con los mismos interrogantes y menos certezas.
Lo tenía claro, no buscaba nada. Tal vez lo encontré... De la misma manera que me pregunto cómo sé que después de hoy habrá un mañana, por mucho que lo espere sin garantías. Supongo que se trata de eso, de aguantar los vendavales y que te moldeen. Tal vez aprenda a hacerlo y a aceptar que traen cosas inesperadas.
Sé que no tengo ni idea de nada, pero tengo algunas cosas que enseñar... ¿Quién sabe? Igual alguien aprenda. Igual soy yo. Tampoco lo espero. Me quedo con ser verso.
No me importa no saber nada, esperar lo que tenga que venir. Acabo de decidir que para eso he venido: para ser estrofa. De cualquiera, aunque lo único que tengo claro es que sobre mí nunca se ha de escribir el último verso...
Como tantas otras veces traté de buscarle sentido a una misma situación encerrada en un círculo vicioso.
Pero ya no, ya no busco respuestas; quizás busque más preguntas que me dejen con los mismos interrogantes y menos certezas.
Lo tenía claro, no buscaba nada. Tal vez lo encontré... De la misma manera que me pregunto cómo sé que después de hoy habrá un mañana, por mucho que lo espere sin garantías. Supongo que se trata de eso, de aguantar los vendavales y que te moldeen. Tal vez aprenda a hacerlo y a aceptar que traen cosas inesperadas.
Sé que no tengo ni idea de nada, pero tengo algunas cosas que enseñar... ¿Quién sabe? Igual alguien aprenda. Igual soy yo. Tampoco lo espero. Me quedo con ser verso.
No me importa no saber nada, esperar lo que tenga que venir. Acabo de decidir que para eso he venido: para ser estrofa. De cualquiera, aunque lo único que tengo claro es que sobre mí nunca se ha de escribir el último verso...
Tus dudas e incertezas me asaltan, me preguntan por mi yo más cercano al tuyo y me digo a mi misma que no es para tanto, que todo el mundo tiene esa estúpida sensación de pertenecer a ningún lugar, de no tener nada importante que decir, de olvidar las fuerzas para aprender. Tengo un día triste, pero los encuentros que la red me brinda me dibujan un ligero y veraz medio sonreir en esta cara asimétrica (sí). Hasta ya. Besicos.
ResponderEliminarAsimétrica? Deberemos indagar en ello.
ResponderEliminarNo, no es lo que más me ha llamado la atención de tu comentario, pero ya sabes que soy así, idiota por naturaleza...
Te echo de menos, tengo ganas de verte sonreír asimétricamente por mis idioteces, es tan sencillo como eso.
Espero verte ya, o antes.
Beso y gracias por pasarte por aquí...
M.
p.d. No sé parlar-te en castellà! Mea culpa, I know!